viernes, 15 de mayo de 2009
Leonardo Padrón: "Yo no soy un imposible"
PUBLICADO POR TODO EN DOMINGO
Carmen Maura, Mario Vargas Llosa, Juanes y Aldemaro Romero son sólo algunos de los entrevistados del reconocido escritor caraqueño para la primera temporada televisiva de Los Imposibles, a estrenarse este mes de marzo por Venevisión.
Por Pablo Ernesto Blanco. Fotos: Guillermo Felizola
Fue en el año 2005 cuando se escuchó, a través de Onda 107.9FM, la primera emisión del programa de entrevistas Los Imposibles, a cargo del escritor Leonardo Padrón. Producto de esas conversaciones históricas, en frecuencia modulada, surgió una obra impresa homónima de colección. Este ejercicio del dial al papel se ha repetido dos veces más, con lo cual ya se acumulan tres temporadas radiales y tres libros del mismo espacio. ¿Qué restaba entonces? Verlo en televisión. Y así será. El proyecto llega este mes a la pantalla de Venevisión, en horario nocturno y dominical. Con respecto al origen de esta iniciativa, comenta el autor: "Es que en muchas oportunidades, al final de cada entrevista radial con personajes tan grandiosos, exclamábamos: 'Dios mío, ¿quién tuviera aquí una cámara?'". Y la tuvieron. Desde julio de 2008, comenzaron a registrarse -dentro y fuera de Venezuela- los primeros capítulos de esta saga en formato audiovisual. Y hasta el sol de hoy los productores continúan en la búsqueda de esas figuras "imposibles de entrevistar, imposibles de no entrevistar, imposibles de olvidar, imposibles de amar, de odiar o de silenciar", según la premisa original que motivó esta aventura multimediática.
¿QUIÉN TUVIERA AQUÍ UNA CÁMARA?
Horas antes de comenzar la grabación de una de las emisiones de Los Imposibles en televisión puede verse a Padrón, de 49 años, haciendo gala de sus habilidades multitasking: envía mensajes de texto a través de su teléfono celular, llama a su novia, la actriz Anastasia Mazzone, se lee las fichas de preguntas para el programa y termina de ingerir un jugo natural, mientras bromea con los camarógrafos. Leonardo es un tipo amable, de gestual pausada, con un buen sentido del humor y una evidente facilidad para insertar metáforas en sus diálogos cotidianos, sin por ello pecar de rebuscado. Al hacer su entrada triunfal el invitado de turno -en este caso, José Luis Rodríguez- el entrevistador se encarga se romper el hielo con la calidez típica del humor criollo. Posteriormente, escucha atentamente las respuestas -largas o cortas- sin interrumpir, repregunta sutilmente y pasa de un tema a otro apoyado en toda una artillería de sorpresas documentales que conmoverán a su interlocutor. Son sólo algunas de sus herramientas para llevar a cabo lo que él mismo denomina un "viaje" de entrada y salida por el personaje. He aquí, pues, un corto paseo por sus reflexiones.
Entre otras sorpresas se verá a El Puma improvisar con el cuatro
Ahora eres también un conductor de televisión en el área de entretenimiento, una suerte de Daniel Sarcos o Gilberto Correa, podría decirse…
"Hasta aquí llegó la entrevista. Gracias por venir (risas)".
¿Algún adelanto de lo que se verá de Los Imposibles en televisión?
"Tuvimos la bendición de arrancar a grabar en la Meca de Los imposibles, en Hollywood. Entrevistamos nada menos que a Andy García. Conversamos con él una hora y media. Hasta lo puse a tocar bongó. Allá también agarramos a María Conchita Alonso, a quien conozco desde hace mucho tiempo. Me dio una entrevista extraordinaria. También a Daisy Fuentes, la leyenda de MTV, y a las actrices mexicanas Kate del Castillo y Lucía Méndez".
¿Otros personajes que te hayan cautivado especialmente?
"Lo que pasa es que no te quiero soltar todo así tan fácil (risas). Hicimos el programa piloto con Carlos Mata, que es un tipo muy cercano a mí, además de ser un imposible inobjetable. Tú oyes su vida y dices: '¡Guao!'. Te encuentras con cuentos que ya te sabes y otros que, a pesar de ser de antaño, terminan siendo una primicia. Además, nos reímos muchísimo, él es memorablemente jo…".
¿Alguna entrevista histórica para la televisión?
"La que le hice a Aldemaro Romero, cuatro o cinco meses antes de su muerte. Imagínate la importancia testimonial que tiene esa conversación".
¿Cómo te fue con Carmen Maura?
"Felizmente bien. Ella venía de ver una función privada de La virgen negra (la película venezolana en la que la digiriera Ignacio Castillo) y estaba muy contenta. Ya me habían advertido que era un poco dura, pero en la entrevista hizo un despliegue de simpatía espectacular. Dijo un montón de groserías, obviamente acostumbrada a que eso no es un problema en la televisión española. Yo había leído que ella se había conectado con Pedro Almodóvar gracias al sentido del humor de ambos, entonces traté de meterle humor a la conversación y me resultó. Entre otras cosas, me soltó que Almodóvar era un ordinario cuando ellos se conocieron y que para ella eso nunca fue un impedimento para acercarse a él".
¿Quién ha sido la entrevistada más diva hasta la fecha?
"Lucía Méndez es una diva absoluta, con una inteligencia y un sentido del espectáculo asombrosos. Prácticamente hizo la dirección de fotografía de su entrevista: 'Ponme este monitor aquí, ponme este mueble allá…'. Los técnicos tenían tres horas montando las luces y ella, al llegar, las cambió completamente, en aras de preservar el mito de su belleza".
¿Qué es lo más engorroso mientras se monta el set?
"Vigilar que el aire acondicionado no se meta en el sonido, evitar la transpiración si se apaga el aire para que no se meta en el sonido y tener que maquillarme. Al menos Lucía Méndez preserva el mito de su belleza, yo, en ese sentido, no tengo nada que preservar (risas). Los técnicos tienen un sabio axioma: 'Todo lo que se maquilla jo…'. Y es verdad, los artistas, a veces, se ponen fastidiosos antes de empezar a grabar".
"ME ENCANTARÍA HABER CONVERSADO CON DIRECTORES COMO FEDERICO FELLINI"
¿No crees que tú llegues a ponerte así? Ahora te maquillan…
"No chico, yo estoy acostumbrado a escribir en mono. Que tenga que ponerme en 'actitud televisiva' es otra cosa. Pero no dejaré de colaborar con los técnicos porque ahora esté delante de cámaras".
Está visto que tienes muy buena relación con los técnicos…
"Mira, yo comencé a trabajar en televisión hace 25 años como asistente de producción; es decir, yo era el tipo que compraba el café, el jugo y sacaba las copias. Y andaba con los técnicos para arriba y para abajo. Así fue como comencé a respetar su trabajo. Hoy en día los veo, además, como una suerte de termómetro de la audiencia. Cuando presencio una grabación de alguna telenovela mía, como La vida entera, si los veo conmovidos o riéndose me digo a mí mismo: 'La cosa va bien'. Cuando no dicen nada, me preocupo".
Hablando de La vida entera, ¿entrevistarías a Anastasia Mazzone para Los Imposibles en televisión?
"Creo que todavía está muy joven para esto. Hay sólo dos personas realmente jóvenes que yo he entrevistado en calidad de 'imposibles' y son Gustavo Dudamel y Edgar Ramírez. Dudamel porque, a la edad que tiene, posee una fama planetaria, y Edgar porque está relacionándose con unos directores importantísimos y creo que lo que le viene es brutal. Potenciales 'imposibles' hay muchos, como Roque Valero, que es un tipo a quien respeto inmensamente, pero creo que aún le falta obra por construir para ser un 'imposible'".
Fotos: Cortesía Venevisión
En fin, cuando llegue el momento, ¿qué le preguntarías a Anastasia?
"Pero ¿por qué tú quieres meter a Anastasia en esto? (risas). A ver, considero que ella es, en esencia, francesa de espíritu. Así haya nacido en Venezuela, terminó de criarse en Francia y quizás por eso todavía le sorprende muchísimo este lienzo bizarro que es el trópico. Por ejemplo, a veces son las 10:00 de la noche y me sugiere: 'Oye, ¿por qué no salimos a caminar?'. Eso puede decirse perfectamente en París, aquí no. Así que le preguntaría algo así como: 'En estos tres años que tienes sumergida realmente en la piel de tu país, ¿qué virtudes le encuentras tú al trópico sobre el Viejo Mundo?'".
TODO ES POSIBLE
¿Qué le preguntarías a Madonna?
"Me da mucha curiosidad que se haya casado con Guy Ritchie, por ejemplo. Estaba visto que eran absolutamente incompatibles. Me parece particular la conexión que hubo entre dos personajes tan notoriamente disímiles. Por otro lado, ella ha vivido consagrada para eternizarse, me gustaría saber qué es lo más valioso que ha perdido en aras de esa búsqueda. Porque siempre se pierden cosas".
¿Qué has perdido tú, por ejemplo?
"No, yo no estoy en esa búsqueda (risas)".
Pero tienes un programa de radio que se convirtió en libro y que ahora va a ser un espacio de televisión. ¿Eso no es querer eternizarse?
"Pero es que un programa de televisión no eterniza a nadie…".
¿Qué le preguntarías al presidente Hugo Chávez?
"Chávez es un entrevistado que estuve buscando un buen rato para Los Imposibles. Si tuviera la oportunidad le preguntaría si no sería capaz de reconocer públicamente que, de lo que ha prometido, es muy poco lo que ha cumplido. Me llama la atención saber hasta qué punto la megalomanía le ha distorsionado su manera de verse en el espejo. Si él realmente se ve, en lo más profundo de sus entrañas, como un gran presidente, o si está consciente de que tiene años equivocándose, pero sabe que no puede decirlo".
A George Bush…
"Creo que le haría la misma pregunta que a Chávez. Lo que pasa es que con Bush el asunto es peor, porque tuvo la responsabilidad de ser el líder del planeta. Porque ser el presidente de Estados Unidos, grosso modo, es ser el líder del mundo. Me gustaría saber si él tiene claro que el haber sido gobernante de su país desbordó completamente sus capacidades intelectuales".
A Barack Obama…
"De entrada, le preguntaría: '¿Está usted de acuerdo con la reelección indefinida?'"
.
¿A quién fantaseas entrevistar?
"A un gentío. Obviamente, a muchos escritores, dado mi oficio. A Gabriel García Márquez, que tiene rato sin dar entrevistas. Si hablamos de personajes ya fallecidos me encantaría haber conversado con directores de cine como Federico Fellini".
¿Por qué Fellini?
"Por ser la suma perfeccionada del surrealismo. Le preguntaría hasta qué punto cuando él, al terminar de rodar el último fotograma, seguía viendo la vida de esa manera tan delirante.También me hubiera gustado hablar con Charles Chaplin, quien siendo el emblema de la sonrisa y la ternura mayúscula tuvo una vida personal llena de pasillos escabrosos, divorciada de sus películas".
Como Marilyn Monroe…
"Sí, pero Chaplin era más inteligente. Marilyn tenía el sino de las estrellas prematuras, se emborrachó de Hollywood".
¿La incluirías en la lista?
"Bueno, honestamente, me hubiera gustado saber cuánto le duraba puesto el Chanel No. 5 que decía que se aplicaba antes de acostarse (risas)".
LA FRASE MÁGICA
Por lo general, tus entrevistados confiesan asuntos que antes no le habían contado a nadie. ¿Cómo haces? ¿Les pones algo en la bebida?
"(Risas). Fíjate que no tengo idea de porqué casi siempre, en las entrevistas de Los Imposibles, los invitados sueltan esa frase mágica: 'Esto nunca lo había dicho antes'. Hay una amiga mía que me dice que yo sirvo para psiquiatra. Creo que tiene que ver con la cualidad que poseemos todos los escritores de ser extraordinarios escuchando a la gente, ya que nos nutrimos de los cuentos de la gente para hacer historias. En definitiva, el entrevistado siente que yo le estoy 'parando'".
Tú sueles ser muy accesible como entrevistado, ¿no crees que, en algún momento, te pongas 'imposible' de abordar?
"No. Para nada. Desde que estoy en el rol de entrevistador valoro cada vez más al periodista que se me acerca, sin ningún tipo de preferencias. No soy divo, me parece una pendejada extrema".
En todo caso, ¿cómo haces para atender tantos compromisos?
"Lo de asumir, paralelamente, varios proyectos me tiene como loco, enajenado. Escribo La vida entera, viajo al interior a dar charlas en universidades sobre Los Imposibles, grabo entrevistas para el programa, intento la poesía. Mis compromisos no me impiden vivir. No he dejado de leer literatura, que es lo que más me gusta hacer en la vida. Ahorita, por ejemplo, me estoy leyendo La maravillosa vida breve de Oscar Wao, de Junot Díaz, Error Humano, de Chuck Palahniuk y un estupendo libro de cuentos de Sergi Pámies titulado Si te comes un limón sin hacer muecas".
¿Sales con frecuencia?
"No me pierdo un concierto que me llame la atención, no dejo de hacer contacto con la gente. Aquella vieja fábula del escritor ermitaño en la torre de cristal ya no tiene vigencia. El manuscrito de la calle es demasiado maravilloso como para ignorarlo".
¿Se ha planteado un programa de Los Imposibles contigo como entrevistado?
"Habría que evaluar si yo soy un 'imposible', lo cual es poco probable. Los productores me lo han planteado un montón de veces, pero creo que es muy pronto para eso. Entrevistarme a mí sería como ponerle un acorde final al asunto. Como un: 'chán-chán', se acabó".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario